sábado, 12 de marzo de 2016

ARMONÍA CUERPO - MENTE - ESPÍRITU

La vida sana esta estrechamente ligada a nuestro estado emocional. Cuidar este aspecto evitará desequilibrios físicos y mentales.

¿Qué es estar en equilibrio?


Ya en la antigua Grecia, Platón señalaba que "el problema de nuestros médicos es que separan el cuerpo del alma". El desarrollo de diversas disciplinas médicas arribó con el tiempo a un nuevo concepto, que fue avalado por múltiples estudios e investigaciones, y que atribuye el estado de bienestar al desarrollo armónico del ser humano.

Como sostiene la Organización Mundial de la Salud (OMS), el hombre es un ser complejo. No se puede reducir el concepto de salud al perfecto funcionamiento del organismo físico, sin contemplar su satisfacción espiritual y realización social e intelectual. En el equilibrio entre cuerpo, mente y espíritu se encuentra el completo bienestar humano.
A la hora de hablar de bienestar y salud, se deben considerar aquellos elementos que suelen ser relegados como menores, como los desequilibrios del espíritu. Éstos tienen una repercusión inmediata en el organismo humano, cualesquiera sea el sexo o edad de las personas. Pueden presentarse como un malestar profundo, sin llegar a manifestarse en una dolencia determinada.


Sintonizar las emociones

Muchas veces, ante la consulta de un malestar indefinido, el médico responde "no tiene nada". Sin embargo, sí "se tiene algo" que puede definirse como un desequilibrio del espíritu y si no se le presta atención, tarde o temprano se hará presente en la mente o en el cuerpo.
Para lograr un equilibrio armónico es fundamental no ignorar estas señales. Y no tener miedo de establecer cambios frente a los conflictos cotidianos de la vida emocional, con la decisión de evitar que nos afecten en nuestra calidad de vida.


Claves para sentirse bien


  • El Yoga: Las asanas posiciones de yoga, como la posición fetal, de rodillas con la frente apoyada en el suelo) o "el loto" con las piernas cruzadas y la columna derecha, relajan y estiran los músculos.
  • Baño - Relax: Un baño de inmersión caliente o tibio, con el cuerpo semisumergido, es bueno para el estrés porque, como en el agua la gravedad en menor, el cuerpo no siente su peso y logra descansar.
  • Automasaje: Con las manos o con la ayuda de un masajeador especial, presionar amasando los costados del cuello. Luego, extender el trabajo hacia los hombros, tratando de aflojar los nudos de tensión.

APRENDER A RESPIRAR
Con frecuencia, frente a una contrariedad, uno respira hondo y sigue adelante, con una ligera sensación de alivio. También cuando se experimenta una profunda pena, se suele suspirar, como si se eliminará del cuerpo la tristeza. En forma intuitiva, se están utilizando técnicas de respiración para enfrentar dificultades.

Una respiración completa
Ante situaciones de tensión, la respiración se hace superficial. Por eso, una respiración profunda en esos momentos alivia la tensión y ayuda a mantener la mente clara y alerta. Antes del desayuno es saludable realizar una respiración completa. Se respira por la nariz, llenando lentamente la parte baja de los pulmones, luego el centro y, por último, la parte superior. No son tres movimientos diferentes, sino un solo ejercicio continuado.

Consejo: 
Un remedio natural, es realizar actividad física regular, ya que contribuye a reducir los trastornos de ansiedad y complementa cualquier tipo de tratamiento médico. El ejercicio relaja, mientras activa mecanismos hormonales y aumenta las endorfinas. Estas hormonas reducen las sensaciones de dolor, aumentan las percepciones placenteras y mejoran el humor.

                                       





viernes, 19 de febrero de 2016

LA MAGIA DE LA LECTURA COMPARTIDA

Cuando un padre o una madre introduce a un hijo o hija de una manera amorosa en la lectura compartiendo lo que lee, le está haciendo un maravillosos regalo que lo acompañará siempre.

El escritor colombiano Héctor Abad Faciolince lo describe mágicamente en su novela "La Oculta" que cuenta la dolorosa realidad de la violencia colombiana. El protagonista Antonio relata: "Leer una novela leída y subrayada por mi papá era como volver a encontrarme con él a través de la historia del libro; era como si lo estuviéramos leyendo y conversando juntos en la finca, como habíamos hecho muchas veces en la vida, de una hamaca a otra, por las tardes o en el cuarto de ellos, que había sido el mismo de los abuelitos, o en el comedor, durante tantos almuerzos de la tarde. A veces me detenía en la lectura para pensar en la historia e imaginarme las situaciones de lo que estaba leyendo. Mientras tanto, sacaba un brazo por un lado de la hamaca, acariciaba el lomo de Gaspar, con la mirada perdida en la oscuridad, sin ver nada, alejada del mundo, esas cosas que nos pasan cuando leemos un buen libro, y los propios pensamientos flotan, arrastrados por las ideas escondidas en la escritura, como dos nubes que se juntan y se mezclan en el cielo".

Esta imagen de lo potente que es un libro para generar pensamientos propios a partir de lo leído parte en la infancia con las primeras lecturas, pero continúa con un diálogo más complejo en la adolescencia. En esta generación parte del tiempo que los niños dedicaban a la lectura, ha pasado a ser reemplazado por los WhatsApp, los videojuegos, es decir, una hiperconexión con los medios electrónicos. Es importante poner límites para que el poder adictivo de los medios no atrofie el gusto por leer.

A veces un cambio de estrategia en la promoción de la lectura puede reencantar a los niños con la lectura. Fue el caso de Antonia. "Hasta séptimo básico me cargaba leer, mi mamá me leía todo, obviamente no entendía nada. Las pruebas eran tan específicas y llenas de detalles que me iba muy mal. En octavo, me cambié de colegio y la profesora nos hacía elegir los libros y nos contaba brevemente el argumento de cada uno. Así la elección no partía de cero. Luego la evaluación era totalmente diferente, hacíamos trípticos, afiches y trabajos de análisis. Desde ese momento me gusto mucho leer y ahora siempre tengo un libro en el velador".  A diferencia de Antonia, los niños ahora suelen tener el teléfono junto a la cama en vez de un libro. La responsabilidad no es de los niños, los adultos debemos motivar la lectura y limitar el uso de los dispositivos, si de verdad estamos convencidos que la lectura sí importa.



miércoles, 27 de enero de 2016

EL PODER DE LAS PALABRAS

"Nuestro lenguaje forma nuestras vidas y hechiza nuestros pensamientos" Albert Einstein.

Sin duda, todos sabemos que la palabra -hablada o escrita- es imprescindible para una buena comunicación y puede remover las conciencias, transformar las costumbres, elevar a los individuos y también destruirlos.
En esta sociedad tan comunicada de hoy, muchos usan las palabras para difundir lo oculto, contribuyendo a la transparencia pero también, para denostar a las personas. Se critica, se inventa, se manipula o, simplemente, se amplifican los errores y virtudes humanas para favorecer las creencias y conveniencias de cada cual.
Si bien las palabras pueden vencer así las barreras de la libertad de expresión en las sociedades reprimidas, también se pueden convertir en armas para destruir una reputación y, por lo tanto, una vida. Cualquiera difunde aseveraciones sin fundamento. En una sociedad democrática se puede demandar a quien lo hace, pero se requiere contar con los recursos económicos para hacerlo. También es verdad eso de "miente, miente que algo queda". Sobre todo entre los más ingenuos y/o ignorantes, que creen todo lo que se dice sin cuestionarse si la fuente de información es confiable o interesada.

EL RIESGO DE LA PALABRA

Cuando se habla de estudiar una carrera profesional, nadie duda que el médico o el dentista necesitan una educación superior. No sucede lo mismo con el periodista, ya que todavía hay quienes piensan que cualquiera con facilidades para escribir o hablar puede ejercer esta profesión. Tampoco de la importancia de saber investigar la noticia en las fuentes informativas pertinentes y confiables, de expresar las ideas en los términos precisos, ni menos de la formación ética necesaria para ejercer una profesion tan delicada.
Según el informe anual de la organización gubernamental Reportes Sin Fronteras (RSF), Somalia y Siria son los países más peligrosos del mundo para el ejercicio del periodismo. En 2013, siete periodistas somalíes fueron asesinados, cifras sólo superadas por india (ocho) y por Siria, con diez profesionales y 35 periodistas ciudadanos (movimiento en el que los miembros de la propia comunidad se vuelven informadores).
Pero el riesgo para periodista y escritores no sólo esta allí. En la mayoría de los países donde emerge un régimen autoritario son perseguidos. También en las naciones donde abunda el narcotráfico.
Por qué estos profesionales que normalmente no portan armas son considerados peligrosos? Porque hacen uso de la palabra para dar a conocer verdades que resultan incómodas a grupos determinados.
Como decía la escritora Marguerite Schumann: "Las palabras pueden envenenar o pueden sanar. Las palabras comienzan y libran guerras, pero también establecen la paz. Las palabras llevan a los hombres a las cumbres del bien y pueden hacer caer a los hombres a las profundidades del mal".

Finalmente, a lo largo de los siglos, tanto las religiones como otras creencias nos han advertido sobre el poder creador del verbo. Sin embargo, pocos tenemos conciencia de este poder a la hora de referirnos a otras personas y lo hacemos con un descuido y una irresponsabilidad tremenda.
Usemoslas responsablemente.








sábado, 9 de enero de 2016

RESPIRA, DISFRUTA EL AIRE

La respiración es vital para todo ser vivo, es evidente, pero es un acto tan automático que pocas veces nos damos cuenta de su real importancia. Vale la pena parar por un instante para hacerlo con conciencia; relaja, mejora la concentración, elimina toxinas y energiza. Tómate unos minutos...Inhala, exhala y sigue con tu camino.

La mayoría de las personas respira de modo superficial, como una reacción mecánica del sistema respiratorio y con intervalos cortos, con movimientos claviculares en vez de abdominales o del diafragma. Exhalar es tan importante como inhalar, permite sacar todo el aire de los pulmones; se eliminan toxinas del cuerpo para que en la próxima bocanada de aire entre mayor cantidad, y así logremos impulsar la sangre a los órganos vitales.

"Perder la conciencia en nuestra respiración nos llevará con el tiempo a disminuir la capacidad pulmonar, por ende nuestra energía y el ánimo. Falta de oxígeno en la sangre nos hace pensar más lento, provoca fatiga e impide que los órganos funcionen correctamente"

Respiración guiada
Se pueden realizar pausas durante el día para respirar profundo y regalarse pequeños instantes, pero lo ideal es adquirir algunos conocimientos a través de la práctica de Pranayama (regulación de la respiración a través de técnicas y ejercicios) para obtener beneficios más concretos. En disciplinas como pilates o yoga es la respiración la que guía el entrenamiento, permite que la mente se concentre en una sola cosa, se detienen sus fluctuaciones y podemos disfrutar de una práctica serena.

A continuación se presentan tres respiraciones que se pueden practicar en casa para obtener calma, mejorar la circulación y llenarse de energías.

1. UJJAJI, LA RESPIRACIÓN TRIUNFANTE: Es la base de la práctica de Ashtanga y siempre es nasal, es decir el aire entra y sale por la nariz. Esto permite generar calor interno y ayudar al cuerpo a eliminar toxinas . "Produce cambios de presión en los pulmones, ayuda al intercambio de oxígeno y circulación sanguínea, actuando como un segundo corazón", Esta respiración debe ser sonora, simula el sonido del mar y eso se logra cerrando parcialmente la glotis (en la garganta) al sacar el aire del cuerpo.

Indicaciones: Sentarse en el piso con las piernas en loto o cruzadas. Con la espalda recta y el ombligo hacia adentro, relajar los hombros e inclinar el mentón hacia el pecho (Jalandhara Brandha). Los brazos descansan al costado del cuerpo o las manos se ponen sobre las rodillas. "Inhala con la obstrucción parcial de la glotis y dirigiendo el aire a la zona intercostal y clavicular, luego exhala suavemente por la nariz".

2. RESPIRACIÓN COMPLETA: Es excelente para relajarse y dormir profundamente, se trabaja más en Hatha Yoga. Con la misma postura de la respiración anterior se debe inhalar dirigiendo el aire hacia el abdomen, las costillas, pulmones y el pecho, hasta las clavículas. Suavemente se comienza a soltar el aire por la nariz, desde las clavículas hacia el pecho, las costillas y el abdomen. La idea es que esta respiración funcione como una ola que recorre el torso suavemente, buscando así la relajación absoluta.

3. SURYA BEDHA: Esta respiración es energizante y para realizarla se llevan el dedo índice y el mayor (el del medio) al lugar donde empiezan las cejas y se apoyan suavemente. Con el dedo índice se tapa la narina (aleta de la nariz) izquierda y se inhala por la derecha. Tapar ambas fosas nasales y aguantar la respiración un segundo, soltar la narina izquierda y exhalar. Repetir siempre inhalando por la derecha, que es la que nos energiza.




martes, 22 de diciembre de 2015

PREPARAR LA NAVIDAD

Independiente de las creencias religiosas, para la mayor parte de las personas las navidades de infancia quedan grabadas con mucha fuerza en la memoria emocional. Algunas pueden estar teñidas por diversos acontecimientos que las marcaron con una significación muy especial. Por ejemplo, la primera Navidad en que se dejó de creer en el Viejito Pascuero; o aquella en que todos se encontraban un poco tristes por la partida de alguien muy cercano: o bien otra en que se recibió un pasaje para ir a un lugar al que siempre se soñó conocer; o esa Navidad donde la solidaridad fue el sello distintivo.

Si bien los ritos familiares tienen características comunes para cada familia, es importante intentar que cada año la Navidad tenga algo especial o de sorpresa, especialmente cuando hay niños pequeños que se enfrentan a esta fiesta. Pero también hay que cumplir con los ritos cuando crecen, para conservar algo de la magia tan maravillosa que significa esta celebración de la niñez.

Una adolescente se quejaba "desde que crecimos, las navidades ya no son lo mismo. Están muy fomes, les falta ese factor sorpresa que tenían cuando era chica. Todo es tan práctico, mis papás me preguntan qué quiero que me regalen y lo van a comprar conmigo. Mi abuela me compra siempre lo mismo y un año sugirió darme la plata para que fuéramos yo con mi hermana a comprarnos lo que quisiéramos. Me pregunto para qué envuelven los regalos, si es obvio que ya sabemos lo que hay adentro". Este comentario refleja la nostalgia por una celebración que recupere el verdadero sentido de los ritos familiares.

Es verdad que por estas fechas la mayor parte de los adultos se encuentran abrumados por el fin de año, pero para que una celebración resulte especial, se requiere desplegar la imaginación y poner energía en conectarse con lo que les gusta o hace feliz a las distintas personas de la familia.

En la medida que los hijos van creciendo, una buena opción es incorporarlos en la planificación de la celebración, dejar planteado el tema y reunirse con tiempo para conversar de cómo les gustaría organizar la fiesta, los regalos, los amigos secretos, la comida, la decoración y todo aquello que comprende un ambiente navideño. Incorporar a los niños, además de desarrollar su creatividad, les ayuda a interiorizar el espíritu navideño y ocupar su tiempo de manera más productiva. Quizás la pregunta que los adultos debemos hacernos es: Qué podemos hacer para que ellos participen y entiendan el sentido de la Navidad?

Es importante hacer el mejor esfuerzo para que esta Navidad sea para sus hijos o nietos una fiesta muy especial.


martes, 24 de noviembre de 2015

EQUIVOCARSE: UN APRENDIZAJE

Nada nos asusta más que equivocarnos. Vivimos tratando de hacer las cosas bien y cuando fallamos, se nos terremotea la autoimagen, nos cuestionamos nuestras capacidades, nos da miedo la vida o la cotidianidad, según lo grave del error cometido.
Los científicos nos enseñan que la mayoría de las leyes y descubrimientos los han logrado gracias a investigaciónes donde el método está basado en el ensayo y error.
Por qué, nosotros mortales, vamos a aprender de otra manera?
No es el error el que importa, a la larga, sino nuestra capacidad de aprender de él. A tal punto que hay quienes defienden la neurosis como la más tendencia a repetir más que a aprender.
Cómo hacer para que el miedo no paralice el aprendizaje? Lo primero que necesitamos es un otro que confíe en nosotros. Los niños aprenden mejor desde la confianza que desde el castigo. Un adulto capaz de ponernos límites pero que a la vez nos permita caernos y dolernos en la caída porque confía en nosotros. El miedo no es un buen consejero para remediar errores. No enseñanza, paraliza. Y el castigo es una forma de asustar. Poner límites es un acto de amor y, por lo tanto, de confianza. Equivocarse en un niño es el camino de aprender a cuidarse y a cuidar.
El adulto en cambio vive un mundo más complejo, donde equivocarse puede generar más costos personales. Si usáramos el ejemplo de los gringos típico diríamos que el mundo está lleno de casos de personas con gran éxito que son lo que son gracias a un error que cometieron. El que perdió el trabajo por llegar con trago y se convirtió en un gran compositor y cantante de jazz. El que fue millonario porque no entró a la universidad. Es un lugar común pero es cierto, como todos los lugares comunes.
Lo que preocupa de los errores no son los errores mismos, sino la dificultad con que sacamos conclusiónes útiles del error. La auto compasión o la rabia contra otros no nos permite aprender. Buscar culpables, defendernos, es inútil en el camino de aprender, si bien puede ser necesario como defensa en los momentos previos. Hay que primero recordar que no somos dioses y nuestra vida es con equivocaciones. Segundo, buscar lo que nos llevó a equivocarnos. Fue un error propio, de otros, fue al azar, etc.? Y recién después viene la actitud de abrirnos conscientemente a las señales que nos da la vida y los que nos rodean.
No tengamos miedo, equivoquémos, usemos los errores para aprender algo nuevo.
La vida es más rica así.

Por Paula Serrano
Psicóloga.


lunes, 2 de noviembre de 2015

ADIÓS A LA INFANCIA

Con frecuencia se oye decir a padres y profesores de preadolescentes comentarios como "no se que le pasa a esta niñita (11años) de un tiempo a esta parte. Hasta el año pasado era alegre, cooperadora, pero este año esta realmente insoportable, anda irritable, se enoja por cualquier cosa, ha bajado sus notas, cuesta un mundo que haga sus tareas. No está pesada solo conmigo, sino también con su papá y sus hermanos. No se aguanta ni ella misma"
A pesar de la evidencia de la complejidad que representa la etapa del cicli vital para los niños y sus contextos familiares y escolares, entre los diez y los catorce años existe poca litetatura disponible para los padres que les permita comprender a sus hijos, para entregarles herramientas que les ayuden a transitar por este difícil período de tantos cambios. De esta forma podrán ayudar ayudar a sus hijos en esta etapa tan decisiva para la construcción de su identidad.
La manera como fluya la relación padres-hijos en la preadolescencia va a influir definitivamente en cómo se viva la etapa siguiente, que es la adolescencia.
He tomado el título del libro de Paulina Pelochonneau, cuyo subtítulo es "La travesía por la preadolescencia". En este libro la autora parte de su experiencia como Psicóloga clínica para transitar por la etapa que va desde los diez a los catorce años. Se trata de una fase difícil, con cambios profundos en lo biológico y en lo psicológico, que por ello representa un gran desafío para la familia. Textualmente la autora plantea en la introducción: "Abandonar la infancia no es una tarea fácil, pues significa abandonar un tipo de cuerpo, un modo de ser y de ser tratado, una manera de pensar y de percibir el mundo, una forma de relacionarse consigo mismo y con los demás. Son varias las pérdidas que hay que afrontar y son muchos los cambios que se deben procesar, antes de integrarlos en una nueva identidad y en una nueva forma de vincularse con las otras personas y con el mundo en que se habita". Su lectura puede ser muy iluminadora para la comptensión de esta etapa de la vida.
Entre los diez y los catorce años, si bien el apoyo familiar es esencial para la contención de la intencidad emocional que la caracteriza, es frecuente asistir a episodios de desregulación emocional, en los cuales el apoyo que brinda la amistad con otrod niños representa para los preadolescentes un refugio y un espacio para encontrarse a sí mismos y con los otros. La dependencia de los iguales puede ser un factor altamente beneficioso en la búsqueda de autonomía y de nuevos horizontes, pero a la vez puede ser muy peligrosa si los grupos de pertenencia que escogen ejercen una influencia negativa.
Autor: Neva Milicic
Psicólga.